22 nov 2011

Cuba: un único Partido

En Cuba existe un solo partido político, el Partido Comunista de Cuba. Eso no es nada raro en un país proclamado socialista hace más de 50 años. Quizás el desconocimiento de muchos amigos, acostumbrados a la forma de hacer política en sus respectivas naciones, los lleva a formularse criterios equivocados sobre nuestra democracia. Otra razón sería, la política de guerra fría que nunca ha cesado en los medios de desinformación del capitalismo mundial, que pretende satanizar a esta pequeña isla del mar Caribe.

Fruto de la grandeza de la educación en mi país, puedo a pesar de mi corta edad, atreverme a enviar razones al mundo de lo que considero justo. Lo digo sin altanería, con mucha humildad y solidaridad hacia esos miles de jóvenes latinoamericanos y del mundo, que no han podido tener una educación de calidad porque han debido trabajar para subsistir o bien porque se los han negado esos prohombres de la democracia que conciben la Educación como un negocio.

El pluripartismo no asegura democracia por sí solo, como tampoco un partido único. La esencia de la democracia está sin dudas en la voluntad política de los que gobiernan y en el empuje de los pueblos. Puedo asegurar que en Cuba hemos tenido ambas.

América Latina en particular, goza de la existencia de numerosísimos partidos políticos, con diversos colores y consignas identificativas. Sin embargo, con el paso de los años, los problemas no se han resuelto con la celeridad y urgencia requeridas. A mi juicio diré, muy respetuosamente en este caso, que lamentablemente esa realidad solo ha servido para dar empleo a un puñado de politiqueros, con muy bajo nivel de instrucción y como consecuencia proyankees. Lo único que en su mayoría hemos logrado es mantener familias enteras de parásitos que nada aportan y sí han comprometido mucho.

¿Por qué se quiere hacer ver la diversidad de pensamiento como pluripartidismo? Ese engañoso rejuego psicológico, es más de lo mismo, intentos manipuladores que pretenden mantener a los ricos en su lugar y a los pobres, pues, en "su lugar": la miseria. En el seno de un solo partido puede haber y en el caso de Cuba hay, personas que piensan diferente sobre un mismo tema. Eso es obvio, no debería tomar por sorpresa a nadie. ¿Cómo se reuelve el conflicto? ¿Cómo se toma la decisión? Votando. ¿Eso no es ejercicio de la democracia? Con enemigos tan poderosos delante de nuestra narices, dividirnos sería igual a morir, a que todos los millones que destinan a rendirnos se dedique en ese nuevo contexto a colocar a los mismos politiqueros e inverbes (que por desgracia también existen en Cuba) en el poder.

¿Cúal es el esquema más democrático? Seguro que los yankees dirían que el de las sacrosantas Campañas Electorales, donde se derrocha el dinero que no se invierte en los pobres, ni en el desarrollo del país. Los propios EE.UU. tienen en realidad solo dos partidos y ambos en muy buena sintonía. Los temas de desacuerdo entre republicanos y demócratas, son siempre a nivel operativo, rara vez tácticos; en las cuestiones estratégicas siempre están de acuerdo. Eso no es más que un show, ahí quien manda nunca muestra su cara, sin embargo se vende  la imagen a todo color del "país ideal", "refugio de perseguidos" y "defensor de la paz y la democracia del mundo".

!No, amigos latinoamericanos y del mundo! No es este esquema el que queremos, ni el que podemos permitirnos. Saludamos y respetamos la forma de hacer política de cada cual, pero no dedicaremos más tiempo del necesario a este tema. Es mejor avanzar en el desarrollo económico del país, en la satisfacción de nuestras necesidades, en la consolidación de nuestra democracia (que no es perfecta), que emborronar cuartillas en un tema que en esencia nada decide o decide muy poco.

!Hasta la próxima!, 
seguiremos, deBATEANDO.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Compartir

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More